Mi centro es un centro de FP de Construcción, cualificamos al alumnado para trabajos de obras, tradicionalmente realizados por hombres. Es una alegría ver cómo cada año cada vez más chicas jóvenes (>16 años) nos eligen y se matriculan voluntariamente y cursan nuestro ciclo, haciendo las labores propias como pintar, pegar baldosas, poner pladur, etc. Esto es un indicativo de la evolución de la sociedad y comunidad educativa en materia de igualdad.

Tengo un plan de Igualdad transversal anual en el que se trabaja con todos los ciclos y alumnado la igualdad, a través del temario incluyendo mujeres siempre en los ejemplos, celebrando efemérides, requiriendo la participación femenina y concienciando también al profesorado de la importancia de trabajar la igualdad todo el curso.

Mi propuesta tras el análisis del dafo es explotar, mantener y potenciar, estas fortalezas, de hecho en los folletos informativos del ciclo utilizamos imágenes de chicas en lugar de chicos, y oportunidades, pues también estas chicas después en segundo curso realizan la Formación en Centros de Trabajo (Prácticas curriculares) en empresas de construcción, y se titulan y salen al mercado laboral, poniendo en valor a estas chicas al ofrecerlas a las empresas.

Como estrategia para afrontar las amenazas y debilidades que suponen la demanda mayoritariamente de las empresas del sector de la construcción de titulados del género masculino, y también que la matriculación del alumnado en los ciclos es mayoritariamente masculino, sería aparte de conocer estas limitaciones, qué es lo primero que tenemos que saber, tenemos que reorientarnos y decidir acciones para corregir estas debilidades, la primera sería concienciación a través de visitas a institutos dando a conocer nuestros ciclos y que cada vez hay más chicas cursándolos y de manera exitosa, y también a las empresas ofertando esta mano de obra femenina titulada y propiciando que contraten chicas exaltando la validez que tienen trabajando.